La Provincia convocó a los referentes de los distritos más afectados por el dengue para trabajar en la prevención durante los meses de invierno.
En la temporada 2015/2016 se confirmaron 5.246 casos de dengue en la provincia de Buenos Aires. En cambio, en los meses cálidos de 2016 y 2017, la cifra descendió a 1.421. Las autoridades sanitarias de la Provincia explican la tendencia por un lado, por el propio ciclo del virus pero también como efecto de haber promovido el descacharrado en los meses de invierno.
Con ese objetivo, en el hospital El Dique de Ensenada, el ministerio de Salud bonaerense reunió a los referentes de salud y epidemiología de los 14 municipios que concentraron casi el 90 por ciento de los casos, la mayoría del Conurbano.
En la reunión encabezada por la subsecretaria de Gestión y Contralor del Conocimiento, Laura Antonietti y el director provincial de Epidemiología, Iván Insúa, se puso en marcha la campaña de invierno contra el dengue, zika y chikungunya, tres enfermedades transmitidas por el mosquito Aedes aegypti.
Entre los datos que los especialistas expusieron en la reunión se mencionó que, en la última temporada, se redujo cuatro veces la cantidad de casos de dengue confirmados en territorio bonaerense. Si bien Argentina no es un país “endémico” porque no hay circulación viral en invierno, las autoridades provinciales explicaron que es preciso mantener la “vigilancia epidemiológica, es decir que el equipo de salud sospeche e indague la posibilidad de dengue, zika o chikungunya frente a pacientes febriles. También, que los municipios incentiven con jornadas comunitarias las tareas de descacharrado en invierno”.